domingo, 15 de junio de 2008

AVIFAUNA URBANA (I) ESPEJISMO URBANO

Hace ya bastante tiempo me inicie en el apasionante mundo de la ornitología, sería en el año 1996 cuando gracias a un amigo me incorporé a un gran grupo de aficionados a la ornitología algunos de los cuales los considero de mis mejores amigos. Se trataba del Grupo Local de Seo en Sevilla al que hasta hace muy poco tiempo aún pertenecia, con ellos descubrí otra de mis facetas, mi facilidad por conocer y entender a las aves. Era algo que llevaba dentro de mí y que gracias a ellos pude desarrollar. Recorrimos estepas, sierras, lagunas, costas y multitud ecosistemas para observar aves, no solamente se trataba de observar sino de enriquecer nuestro conocimiento naturalistico, observamos al ave siempre relacionandolo con su ecosistema, descubriendo siempre cosas nuevas. Todo ello me ayudó personalmente y también profesionalmente, faceta esta que ya os comentaré en otra ocasión.

A pesar de, como ya comenté anteriormente, recorrer variopintos ecosistemas , hay uno que lo considero favorito, la naturaleza en la ciudad, que gracias a las aves pude desarrollar. Con este post abro un nuevo apartado en mi blog, la AVIFAUNA URBANA, que trataré de ir mostrando en sucesivos comentarios.

El primer post me trae grandes recuerdos de cuando me iniciaba a esto de la ornitologia y desde aquí quiero hacer mención a un amigo que fue coautor conmigo de un trabajo titulado ESPEJISMO URBANO , Juan Alcaide Cebrián, que presentamos al concurso de medio ambiente urbano del Ayuntamiento de Sevilla, y que posteriormente hice yo un resumen para el boletín Plegadis del Grupo Local de Seo-Sevilla, nº2 AÑO 1999.


Pues nada , ahí va el texto integro del resumen....


ESPEJISMO URBANO
Los procesos de rehabilitación ofrecen oportunidades a las aves y a la vida silvestre. Resulta sorprendente cómo al dejarse de utilizar un lugar la naturaleza vuelve a reasentarse en él rápidamente, como ocurrió en el solar que actualmente ocupa el centro comercial Nervión Plaza situado junto al Estadio de fútbol del Sevilla F.C.

En el año 1991, se iniciaron las obras que fueron suspendidas después de construir los muros de contención, quedando una excavación de 274 metros de largo, 105 metros de ancho y 14 metros de profundidad, de los cuales dos estaban cubiertos de agua procedentes de filtraciones del subsuelo y en menor cuantía de la lluvia, manteniéndose constante a lo largo de los años.
Más tarde, y debido a que el fondo de la excavación quedó desnudo fueron reasentándose en él especies vegetales, al comienzo aparecieron pequeñas manchas de eneas y carrizo, favoridas su dispersión por la acción del viento, posteriormente las aves que hicieron uso del humedal sirvieron de vehículo de estas especies y otras como tarajes, sauces y chopos, si bien en mucha menor cuantía.
Todo esto hizo que en un plazo breve la vegetación alcanzase proporciones sorprendentes, los insectos siguieran a la primera vegetación y con éstos llegaran las aves para alimentarse indistintamente de plantas y animales, siendo las primeras en aparecer las más abundantes de las cercanías, como gorriones, mirlos y fringílidos, a las que posteriormente se les unieron otras menos comunes.
En la época de otoño-invierno destacó la utilización de este humedal como dormidero de aves, encontrando aquí un lugar ideal para protegerse del frío y de los depredadores, como fue el caso de un contigente de cientos de lavanderas blancas que al atardecer iban apareciendo de forma paulatina desde todas las direcciones dejándose caer para posarse sobre eneas, carrizo, vegetación flotante e incluso sobre las viguetas que sobresalían de las paredes. Llamaba la atención que una vez llegaba la lavandera se zambullía y bañaba, lo cual es sumamente importante para este ave, ya que le sirve tanto de desparasitación, evitando posibles contagios con el resto de sus compañeras al estar prácticamente juntas en el dormidero, asi como de mantenimiento de su plumaje bastante deteriorado después de su tarea diaria de capturar insectos. A las lavanderas blancas se les unieron otras como mirlos y estorninos negros, si bien en menor cuantía.


Hay que destacar que en los últimos momentos del día el humedal se veía envuelto en una gran excitación en la que los trinos llegaban a ensordecerme para de pronto cesar y dejar paso al silencio de la noche. Con las primeras horas del día las lavanderas levantaban el vuelo formando una gran nube deshaciéndose en todas direcciones hacia sus comederos.

En esta época, y debido a la gran cantidad de aves que utilizan el dormidero, aparecía con asiduidad una gran lechuza común que con vuelo silencioso se dejaba caer levantando a las dormidas aves capturándolas, posteriormente se situaba en un poste próximo que utilizaba para comer sus piezas sirviéndole a la vez de oteadero.



A primeros de marzo, con la llegada de las temperaturas altas, disminuyeron considerablemente las especies que utilizaban la zona como dormidero, de forma especial las lavanderas blancas, las cuales salvo una mínima parte emigraban hacia el norte.

El humedal aportaba el materia necesario para la construcción de nidos, así como alimento para progenitores y cebada de las crías debido al rico y abundante zooplacton, lo que favoreció la reproducción de varias especies de aves. Destaba por su abundancia la gallineta común, la cual se distribuía por todo el humedal defendiendo su territorio con gran agresividad, construyendo sus nidos en los lugares con vegetación más espesa, y dadas las buenas condiciones que encontraban hacía que el número de nacimientos fuese elevado. Era gratificante observar como se desplazaban por zonas abiertas de la vegetación alimentando a sus crías con las larvas y ninfas de insectos que ésta capturaba removiendo las algas de la superficie del agua. También utilizaban nidos complementarios donde los pollos eran cebados cómodamente.


Acompañando a las gallinetas en sus tareas reproductoras aparecieron dos parejas de zampullin chico siendo su observación mucho más dificultosa. En la primavera de 1994 una pareja de cernícalo vulgar aprovechó uno de los huecos existentes en las paredes del estanque para instalar su nido. Las entradas y salidas eran continuas al principio, aumentando posteriormente con el nacimiento de los pollos ya que el cebado de éstos obligaban a los padres a un mayor esfuerzo en su búsqueda de alimento, sin embargo, los cernícalos tenían en el humedal a su mejor aliado debido que les proporcionaba numerosas presas entre insectos, aves e incluso murciélagos. Al poco se dejaron ver un par de pollos encaramados en una de las viguetas que sobresalían de las paredes donde los padres les seguían cebando hasta que éstos pudieron valerse por sí mismo. Despúes en el año 1996 se instaló una pareja de calamón sacando adelante a un pollo, hecho que sorprendió a más de uno.
Además, a primeras horas del día aparecían grandes bandos de vencejos comunes y pálidos que con vuelo ágil y veloz capturaban gran cantidad de insectos. A éstos se les unían aviones comunes y golondrinas comunes, los primeros volando en pequeños grupitos a media altura, los segundosd con vuelos rápidos y rasantes sobre el agua. A su vez, aparecían otras insectivoras como mosquiteros, currucas capirotadas e incluso algún petirrojo. Es de destacar la presencia de un mamífero alado, el murcielago común que de costumbres nocturnas y crepusculares se alimentaban de insectos que capturaban en vuelo, siendo el murciélago presa habitual del cernicalo vulgar. Tanto las aves insectivoras como los murciélagos juegan un importante papel en el control de insectos nocivos en las ciudades ya que con su dieta reducen considerablemente sus efectivos, mejorando la calidad de los habitantes urbanos.

El lugar que tanto admiré cambió su fisonomía. No volveré a maravillarme como cuando cientos de lavanderas partían hacia los campos, ni de la ternura de la gallineta común alimentando a sus polluelos, ni de la destreza del cernicalo atrapando murciélagos, ni de casi nada de lo que he descrito. Sólo me queda el recuerdo de como este lugar me hizo la vida más alegre. El hombre creó, sin proponérselo, un medio donde la naturaleza se recreó haciendo un vergel de un terreno baldío, pero sabemos que todo fue un ESPEJIMO.



Posdata: las fotografias de fauna no son mías, las he cogido al azar en internet , pido disculpas a sus autores si no es de su agrado que las ponga en mi blog.





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